Plan suicida

Me dejé cautivar por la fina capa de agua que estremecía las hojas de los árboles, no estaba planeado, como nada de lo que he hecho, sin embargo me seducía desde hace tiempo la idea del suicidio.

No puedo negar que lanzarse al vacío con el arrullo del viento, para llegar a lo profundo de un sueño sin terminar causaba un poco de miedo en lo que los médicos llaman corazón, todo mi ser palpitaba con la única incertidumbre de saber que venía después, no obstante, cuando todo ocurría sin intenciones de detenerse, vi mi cuerpo caer al pozo vacío y reventarse ante un suelo paralelo al cielo, entonces comprendí que sólo era una parte de mi la que había tomado esa decisión y que aún quedaba otro poco por conocer.

No fue cobardía, no fue temor....fue curiosidad...proveniente de la locura que pocos asumen, pero que todos poseen. Sólo entonces recordé el cuerpo fragmentado y todo lo que vino después; no hubo llanto, ni dolor...sólo un obscuro y frío vacío, sin soledad, sólo nada....

Hoy el viento arrecia contra los barcos encallados en las costas, mientras la tormenta canta una canción de cuna, que hace mucho tiempo no escuchaba. Entre las mantas busco refugio ¿de qué? ¿por qué?, no lo sé...sólo dejo que la melodía me arrulle hasta caer en el frío y obscuro vacío.