Creer que la cura de todos los males es una estocada mortífera en la espalda directo al corazón, al compás de una melodía tormentosa y amarga. Atrapado en la sonrisa de un arlequín que repite lo que no quieres oír, presta atención, porque entre las barajas está el martirio, el llanto del infante desconsolado que pide ayuda, el que realmente es necesario.
marzo 31, 2011
Viaje de medio tiempo
Creer que la cura de todos los males es una estocada mortífera en la espalda directo al corazón, al compás de una melodía tormentosa y amarga. Atrapado en la sonrisa de un arlequín que repite lo que no quieres oír, presta atención, porque entre las barajas está el martirio, el llanto del infante desconsolado que pide ayuda, el que realmente es necesario.
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No tengo mucho que decir, realmente.
ResponderEliminarVaya, creo que me he perdido un poco, quiero decir, he perdido mi camino literario.... Mi "yo escritor" sólo apareció un momento y ahora se esfumó otra vez, abandonándome quizás por cuanto tiempo más.
Yo no serviría para esto, al menos no como trabajo a tiempo completo....
Pero siento, más que creo, que tú sí servirías.
Y, bueno, lo prometido es deuda....
Tú me entiendes.